Me llama mucho la atención que, al llegar las entrañables fechas de Navidad, nos llega a tod@s un especie de ola de buenos sentimientos y si, hablamos del nuevo año, de buenos propósitos. Es más, he llegado a tener la sensación de que estamos como adormecidos por una especie de sustancia opiácea formada por el consumismo navideño, las copiosas comidas y cenas familiares y, por supuesto, las interminables fiestas y excesos. Para casi cuatro millones de personas de este país posiblemente hayan supuesto una evasión fugaz del gran problema que supone no tener un empleo; o tal vez haya sido una cruel situación que les recuerda la cruda realidad en la que se encuentran.
Me sigue llamando la atención cómo cada vez más a nuestra "élite gobernante" les encanta estas festividades religiosas en las que nosotros, sus "fieles súbditos", olvidamos lo mal que lo están haciendo. Cuando se acaben estas vacaciones navideñas, ya se encargarán de quitar el crucifijo otra vez y de buscar otra forma de distraernos para que miremos a otro lado que no sea la Moncloa. El gran Suetonio hubiese identificado este fenómeno como el "pan y circo" de la vieja Roma. No obstante, he de decir que, el "Gran Duque de la Moncloa " Rubalcaba, haciendo alarde de su astucia zorril, ya se ha encargado de recordarnos que esa banda de asesinos totalitarios llamada ETA existe y que debemos preocuparnos por ello. Es evidente que, como ministro de interior, "no le interesa que el terrorismo" no sea la principal preocupación de los españoles puesto que ahora lo es el paro.
Finalmente, Me llama la atención cómo en las Fiestas Navideñas, se fomenta todo lo relativo a la familia desde todos los medios y ámbitos posibles. Sí, la familia, esa institución milenaria y que la están dilapidando estos políticos amorales cuyo único referente intelectual es la dictadura del relativismo. Fomentan la familia a la vez que la están destruyendo poco a poco. Celebran el día de los Santos Inocentes, cuando son ellos los que permiten y propician que cada día maten más y más niños inocentes cuyo único delito es existir dentro de un útero, es tener VIDA. Pues todo esto es lo que me llama la atención. Pero lo que más miedo me da es que hay gente a quien problemas como estos no le llaman la atención.
¡ Feliz 2010!
